Dilo...
Dilo con altavoz..
con voz franca y directa...
que el sonido rebote en los rincones de mi sinrazón, donde el virus de la soledad de hace fuerte y descontrola mis desvaríos.
Dí...porque necesto oirlo, necesito que cada letra estabilice y equilibre mis escombros.
Que me llegue, que lo invada todo, que se impregne en mi pelo. Que haga latir mis sienes y retuerza mis tendones, que se clave bajo mis uñas y me traiga sabor a vida.
Dímelo mil veces sin respirar, satura y revienta mi memoria.
Hasta que piten mis oidos grítalo junto a mi nuca, para que lo palpe, para que no se me olvide cuando te gires y te pierdas de mi.
Déjalo escrito por las paredes en mil idiomas y lenguas distintas, en los techos de las habitaciones del hastío. Que la tinta gotee y se tatue sobre la piel de mis hombros, que no exista espejo que no refleje tus palabras en mi desnudez.
Búscalo con saliva sobre mi lengua, incendiala hasta doler y quedar áspera de abandono.
Escríbelo con letras de neon sobre mis pupilas, para leerte allá donde no estes, para no perderlo de vista si me quedo sin luz.
Haz que forme arañazos en mi espalda y mordidas en mis piernas. Que las heridas tarden en cerrar y duelan cuando respire.
Dímelo una vez más, directo, sin escalas, sin parpadear, dispara mi pecho con tus palabras y arranca éste motor.
Dímelo.....
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